Exhibe la Diputación de Bizkaia estos días una campaña sobre las drogas que tiene el poder de retrotraerte a un pasado que parecía superado. Como puede verse en los carteles y el vídeo que incluyo en este post, el mensaje destaca que si consumes drogas (así, sin matices; ¿para qué?) tu cabeza se transformará en la de un insecto. Vamos, que pierdes la cabeza. A lo que añade que el consumo de drogas provoca daños cerebrales irreversibles, apelando a la acción familiar para evitarlo.
Esta campaña es un buen exponente de la pereza intelectual que a menudo subyace en este tipo de iniciativas, del gusto seguramente de los alarmistas de guardia. Flaco favor se hace a la promoción de la salud, a la prevención, a la ética y aun al sentido común con campañas de las que lo menos que puede decirse es que, en su moralina de mercadillo, carecen del más mínimo rigor y dejan la tan cacareada evidencia para mejor ocasión (que estamos en verano, oye).
En una comunidad autónoma que durante décadas se preció de su talante innovador en la materia, da vergüenza ajena observar con qué desenfado se cometen tamaños desafueros con dinero público. Eso por no preguntarse qué hace la diputación metiéndose en estos berenjenales.
Dejo aquí el spot que se está utilizando en los cines.
Juan Carlos Melero 
Me parece un desprósito de campaña. Muchas acciones en esta cuestión admiten pareceres y visiones diferentes, pero esta no pasa ni el error del novato. Creo que el gasto público debe ir acompañado de un mínimo rigor que lo justifique. Esta campaña no lo pasa ni a presión. Buen artículo compañero.
Cosas veredes…
Desinformar es la ley.